- Residencia real: Es la residencia oficial del monarca británico en Escocia, aún utilizada por el rey Carlos III para ceremonias de estado y actos oficiales cuando se encuentra en Edimburgo.
- Interiores históricos: Echa un vistazo a las habitaciones repletas de techos de escayola ornamentados, muebles originales del siglo XVII, cuadros de valor incalculable y tapices centenarios de Francia y Flandes.
- Antigua abadía: Pasea por las inquietantes ruinas de la Abadía de Holyrood, fundada en 1128 por David I. En su día celebró bodas reales, coronaciones y entierros junto al propio palacio.
- Una escapada frondosa: Tómate un respiro en cuatro hectáreas de jardines paisajísticos con vistas al parque Holyrood. Estos terrenos reales cuentan incluso con árboles raros, como el legendario olmo de Wentworth.
- Intersección de arte e historia: Ochenta y nueve retratos se alinean en esta Gran Galería, mostrando a monarcas escoceses desde antiguas leyendas hasta reyes actuales. Es la sala más grande del palacio y está repleta de obras de arte encargadas por Carlos II.